Hemos visto todos los códigos de barras en nuestras vidas del día a día: en el supermercado, tienda de ropa, garaje de estacionamiento, lo que sea. Pero en los últimos años, un tipo diferente de código de barras se ha vuelto cada vez más popular gracias a la revolución móvil:
Códigos QR o de respuesta rápida.
La diferencia entre un código QR y un código de barras normal es que los códigos QR almacenan información en dos dimensiones, por lo que aparecen como cuadrados pixelados en blanco y negro, cada uno contiene un patrón único. Además, están diseñados para ser leídos por una cámara de teléfono móvil, mientras que un código de barras normal utiliza un escáner.