Esterilizadores

Los esterilizadores son dispositivos diseñados para eliminar o destruir todas las formas de vida microbiana, incluyendo bacterias, virus, esporas y otros microorganismos. El esterilizador se usa en diversos entornos, como la industria médica, laboratorios, procesamiento de alimentos y cuidado de bebés, entre otros. Existen diferentes sistemas para esterilizar objetos potencialmente contaminados. Cuando el aparato depende de la energía eléctrica para funcionar, en algunos casos se le llama esterilizador eléctrico.

Tipos de esterilizadores según su uso profesional

Uno de los más demandados es el esterilizador dental, usado para mantener la higiene de los elementos odontológicos. El esterilizador médico, en tanto, está pensado para instrumental menos específico, pero con iguales resultados para la higiene. Sin duda, uno de los ámbitos en los que más necesarios son estos aparatos es en un quirófano. El uso de un esterilizador quirúrgico es obligatorio antes de realizar una cirugía. En algunos casos, se usan aparatos un tanto más grandes y con más funciones, los autoclaves quirúrgicos. El esterilizador de laboratorio también es sumamente necesario para eliminar la presencia de patógenos o para evitar que las muestras de investigación se contaminen. Existen también aparatos más pequeños e incluso portátiles para otros rubros que requieren higiene como los esterilizadores para estética, que se usan para instrumentos de belleza, como cortauñas, pinzas depiladoras, navajas, tijeras, etcétera. Hay diversos tipos de esterilizadores mucho más sencillos para garantizar la higiene de biberones y otros objetos que usan los bebés.

Esterilizadores de vapor, autoclaves y esterilizadores quirúrgicos

Los esterilizadores de vapor utilizan agua a presión y vapor a alta temperatura para eliminar todo tipo de microorganismos. Son muy beneficiosos en términos de eficacia y versatilidad en su uso, pero suelen ser aparatos que requieren de gran cantidad de espacio y energía. Los autoclaves y esterilizadores quirúrgicos, aunque pueden tener diferencias en capacidad y eficiencia, en general, se basan en el mismo principio de funcionamiento. Al usar vapor, existe el riesgo de corrosión o daño en materiales sensibles al agua o al calor. Se usa en industrias médicas, laboratorios y procesamiento de alimentos, donde la esterilización es fundamental y se requiere de una eficacia total sin errores.

Esterilizadores industriales con exigencias específicas

Por sus beneficios y desventajas, es necesario elegir con cuidado el esterilizador según la industria para la que se lo necesite. Los esterilizadores de calor seco, por ejemplo, utilizan aire caliente para eliminar microorganismos. De esta manera, son ideales para tratar materiales sensibles al vapor o que podrían dañarse con la humedad. Son muy utilizados en industrias con equipos electrónicos y textiles. En este caso, el tiempo necesario para la desinfección es más prolongado que en otros sistemas. Los esterilizadores químicos, en tanto, utilizan sustancias como óxido de etileno, son útiles para desinfectar equipos sensibles al calor. Son un buen reemplazo en la industria médica y los laboratorios cuando se manipula material o maquinaria sensible al calor, pero requieren de ciertos químicos para funcionar correctamente. Otros muy usados son los esterilizadores UV. Estos aparatos dañan el ADN microbiano con luz ultravioleta, siendo beneficiosos para desinfectar superficies. Sin embargo, pueden tener limitaciones en la penetración, por lo que no son aptos para instrumental complejo. Los esterilizadores UV ofrecen desinfección sin productos químicos. Son la mejor opción para desinfectar superficies planas. Se utilizan en salud, alimentos y laboratorios. Otros esterilizadores por radiación más complejos emplean rayos gamma. Son efectivos en productos médicos y alimentos. Requieren instalaciones especializadas y complejas, pero tienen una gran efectividad.